Este verano he tenido el privilegio de pasar mis vacaciones como invitada en un pueblo de Salamanca, Martín de Yeltes. Las personas que me invitaron son muy importantes en mi vida, nos queremos sinceramente y hemos disfrutado con verdadera avidez los días compartidos. Paseos, excursiones, siestas, risas, partidas de cartas y parchís en el patio al anochecer y en dicho patio compartimos vida con unos papás gorriones que estaban totalmente entregados a sus dos polluelos. Me tenían hipnotizada, no podía dejar de estar atenta a todo lo que ocurría en el pequeño y escondido nido pues lo tenían bajo la teja de una tenada. Dos o tres días antes de volver a casa los polluelos abandonaron el nido. Fue un momento tan natural y mágico que no soy capaz de describir lo que sentí. Cuanto nos enseñan los animales... Todos los que estábamos en esa acogedora casa sufrimos el síndrome del nido vacío, Cómo los echábamos de menos... Feliz vuelo pequeños.
Mostrando entradas con la etiqueta Animales. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Animales. Mostrar todas las entradas
domingo, 9 de octubre de 2022
miércoles, 29 de abril de 2020
domingo, 19 de enero de 2020
domingo, 13 de octubre de 2019
lunes, 1 de abril de 2019
miércoles, 18 de julio de 2018
lunes, 2 de abril de 2018
domingo, 13 de agosto de 2017
miércoles, 9 de agosto de 2017
domingo, 14 de mayo de 2017
sábado, 13 de mayo de 2017
miércoles, 3 de mayo de 2017
Suscribirse a:
Entradas (Atom)